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Día Mundial contra la trata de personas

 

trata-de-blancasLa Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), señala que por primera vez, hoy 30 de julio de 2014, se conmemora el Día Internacional de la Lucha contra la Trata de Personas, llamando la atención de la comunidad internacional sobre las graves implicancias de un delito invisibilizado durante muchos años.

Por «trata de personas» nos referimos a la captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, al rapto, al fraude, al engaño, al abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad o a la concesión o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra, con fines de explotación. Esa explotación comprende como mínimo, la explotación de la prostitución ajena u otras formas de explotación sexual, los trabajos o servicios forzados, la esclavitud o las prácticas análogas a la esclavitud, la servidumbre o la extracción de órganos1.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) sostiene que a pesar de las dificultades de precisar globalmente el número, se estiman en alrededor de 800,000 las personas que son víctimas de trata año a año2.

El Informe Anual 2014 de UNODC por su parte, luego de recoger datos de 155 países, sostiene que la forma más común de trata de personas es aquella con fines de explotación sexual (79%), seguida de la trata con fines de explotación laboral (18%). Las mujeres son las víctimas principales y cerca del 20% del total son niños y niñas.

Las crisis humanitarias y conflictos armados, al verse debilitadas las estructuras del estado como garante efectivo en el cumplimiento de derechos de las mujeres, hombres, niños y niñas, vienen a configurar escenarios en los cuales, se pone en riesgo la integridad física y psicológica de millones de personas por parte de redes transnacionales dedicadas a este delito. El funcionamiento de estas redes es tan complejo, que sólo el diseño e implementación programas integrales pueden abordarlos de manera efectiva con la colaboración del estado, sociedad civil y también el sector privado.

Las condiciones de vulnerabilidad de las personas ante la trata incluyen factores estructurales y sociales que abarcan la falta de acceso a la educación por parte de mujeres y niñas, la inequidad de género, los estereotipos socio-culturales que culpabilizan a las víctimas, la feminización de la pobreza, y la falta de acceso a medios de sustento y oportunidades laborales. Hay que agregar además la existencia de vacíos legales en el ordenamiento jurídico, la falta de tipificación del delito de trata a nivel de los estados, y la ausencia de dispositivos que penalicen la demanda por parte de los clientes de las diferentes modalidades de trata (por ejemplo, con fines de explotación sexual).

Las dinámicas de desplazamiento masivo de población resultante de los conflictos armados y desastres naturales, ponen a los refugiados, desplazados internos, apátridas, y migrantes en una situación de vulnerabilidad ante este fenómeno. Las corrientes transfronterizas no son solamente de larga distancia. Gran parte de las dinámicas transfronterizas de trata de personas tiene lugar entre países de la misma región y, en particular, entre países limítrofes. No obstante, también hay dinámicas y rutas de trata de personas a nivel intercontinental. Así, las rutas de trata transfronteriza que unen Centro-américa con México y los Estados Unidos constituyen tan sólo un triste ejemplo de un escenario que se repite también en otras geografías de Europa, Asia, África… La prevención resulta así una pieza fundamental, a desarrollarse en diferentes niveles y por diferentes medios, especialmente en el ámbito comunitario.

A los avances realizados en el impulso, negociación y firma de importantes instrumentos de promoción y protección de derechos de las víctimas, se suman destacables campañas de sensibilización masiva por parte de organizaciones internacionales, organizaciones no gubernamentales en diferentes lugares del mundo. Entre ellos, hay que mencionar el Protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente mujeres y niños, que complementa la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional, más conocido como Protocolo de Palermo, cuya entrada en vigencia tuvo lugar en 2003. El número de estados en firmarlo y ratificarlo durante el período, se ha venido incrementando paulatinamente, ascendiendo en la actualidad a 125. Otra instancia a destacar comprende al Grupo de Coordinación Inter-Agencia contra la trata de Personas –ICAT, según sus siglas en inglés-. Se trata de un foro de discusión y debate de políticas con mandato especial de la Asamblea General de Naciones Unidas, y nuclea a las diferentes agencias con competencias en la materia, facilitando la prevención y lucha contra la trata de personas, incluyendo la protección y asistencias a las víctimas.

A pesar de los logros en la generación de información, perfil de víctima, de cliente, de instrumentos de identificación y atención directa, de regulación internacional, modificación de ordenamientos jurídicos internos por parte de los diferentes Estados, restan aún muchos desafíos por abordar para erradicar la trata de personas del escenario social, económico y político mundial, para ello, promover medidas preventivas, asegurar la penalización del delito, y promover la igualdad de género, constituyen tareas importantes por realizar que ningún Estado debe obviar. Este día ofrece por cierto, un espacio para reflexionar y actuar sobre el cómo, cuándo, y por qué medios: la invisibilidad no es opción.


1.- Protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente mujeres y niños, que complementa la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional, Art. 3.

2.- Deben contemplarse además, las víctimas de trata a nivel interno, no transfronterizo. A Global Report on Trafficking in Persons, United Nations Office on Drugs and Crime (UNODC)

 

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