“Podría ser un secuestro improvisado por la rama local de Al-Qaeda”
MAURITANIA– La debilidad del Estado facilita la actuación de criminales y terroristas en un territorio inmenso y falto de control
COOPERANTES– Cualquier objetivo occidental es sinónimo de rescate
Economista y militar retirado, Jesús A. Núñez es experto en temas de seguridad, construcción de paz y prevención de conflictos en el mundo arabo musulmán. Además de codirigir el Instituto de Estudios Sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH), con sede en Madrid, Núñez también es profesor y consultor del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
¿Mauritania es considerado un país de riesgo desde el punto de vista de amenaza terrorista?
Mauritania no destaca por conflictividad y violencia, pero es cierto que tiene una estructura estatal muy débil. Se trata de un territorio inmenso donde viven cuatro millones de personas que han sufrido sucesivos golpes de estado. Hay una gran falta de capacidad de control del territorio y este vacío lo aprovechan contrabandistas, bandas criminales y también terroristas. La zona conecta el Magreb con el África negra y es utilizada por redes transnacionales para el tráfico de mercancías y de personas porque la debilidad de las estructuras del Estado lo facilita.
¿Existen grupos terroristas bien identificados en la zona?
Entre los grupos mauritanos no hay un líder. Destaca la presencia de Al-Qaeda del Magreb Islámico (AQMI), que proviene del grupo argelino Grupo Salafista para la Predicación y el Combate, que ya había cometido actos terroristas y que hace tres años anunció su conexión con Al-Qaeda como representante del Magreb. Desde entonces, ha trasmitido la idea de que tienen capacidad para actuar en todo el Magreb y así lo ha hecho.
¿Todo apuntaría a que este grupo podría ser el responsable del secuestro de los tres cooperantes catalanes?
Teniendo en cuenta que no existe ningún otro grupo en la zona, sí. La hipótesis que tendríamos que imaginar es la de un acto cometido por ellos o bien por bandidos locales que trafican con los secuestrados como una mercancía que ofrecen a los terroristas.
¿El grupo de cooperantes tendría que haber tomado más precauciones?
Las burbujas de seguridad acaban alejando a los cooperantes de su objetivo principal. Por otro lado, si deciden contratar seguridad privada, a menudo se les acusa de pagar mercenarios y de financiar organizaciones que no son propias de la cooperación. La seguridad nunca es total por evitar un secuestro, pero es que tampoco es la prioridad de los cooperantes.
¿Por qué los cooperantes se han convertido en un objetivo específico?
Hay una militarización cada vez más fuerte de la acción humanitaria. Los actores militares que entran en escenas de conflictos se disfrazan de cooperantes y la población local ya no los distingue.
¿Cree que los secuestradores sabían quiénes eran los secuestrados, entre los que hay un empresario?
Me sorprendería mucho. Circulaban por la carretera más transitada del país, por donde pasan objetivos potenciales continuamente. Basta con que alguien diera el aviso desde una gasolinera. El objetivo más fácil era el último coche. Tal como marcha todo, me suena a acción improvisada. Cualquier objetivo occidental les sirve para obtener un rescate y lanzar una proclama.
¿La gestión del secuestro del Alakrana ha dado alas a otros grupos?
La inmensa mayoría de los secuestros se han resuelto con el pago de un rescate, y no solamente el del Alakrana. Las soluciones militares son la excepción. Generalmente, el objetivo occidental es sinónimo de pago de rescate.
